Los clientes compran una casa en obra gris en un proyecto cercano al centro histórico.

​

El objetivo: cambiar la distribución interior ofrecida por el constructor, elegir cada uno de los acabados y diseñar/construir el mobiliario final sin salir del estilo colonial típico de la zona y clásico de los clientes. 

​

El resultado: Una casa completamente funcional, iluminada y limpia que trasmite a través de sus materiales, tonos y texturas la calidez de un hogar. Para lograr plasmar el estilo colonial se resaltaron las vigas, marcos, puertas, closets y huellas de los escalones en el tono natural de la madera,  Cada uno de los cajones y puertas de la cocina se diseñaron para ser 100% funcional y al mismo tiempo darle un toque elegante, las manijas plateadas brillantes resaltan los tableros de madera blanca y hacen un perfecto juego con el mesón en mármol carrara, este mismo se utilizo en los mesones de los baños.  El baño de visitas tenia que ser un protagonista por lo que se eligieron tonos dorados en las griferías y un mosaico muy clásico para el piso, el mueble es completamente permeable y se elige un tono blanco para resaltar los tonos dorados. La chimenea se cambio de lugar para ser el centro de la sala, la piedra blanca que se eligió para su acabado es imponenteEn las habitaciones, cada cama y mesa de noche tienen su estilo y diseño según el gusto de cada uno de los hijos, siempre conservando un estilo clásico y elegante. Las cortinas se realizaron en tonos crudos sobre bolillos en madera para conservar la sencillez. El mayor acierto: el piso. se eligió una cerámica imitación madera de alto trafico, en tono similar al nogal con tonos miel, su acabado resulto ser perfecto para el polvo característico en el pueblo. Por último y aun en proceso, se encuentra el patio, se diseña una pérgola estilo industrial que contrasta a la perfección con el estilo colonial de la de la fachada de la casa, el jardín es sencillo y sobrio, siendo el telón perfecto.